Mi regalo de navidad. (priv/Alcalde)

Despues de la ventisca, despues de la cena, y despues de la fiesta navideña eran mas comunes nuestras salidas entre Jaejoong y yo, pero en todas, por algun motivo, existia un tipo de contacto, y por si fuera poco, era labial, y por algun motivo sus manos en mi cintura me agradaban, ahora el me habia dicho que si pasabamos juntos la navidad, para mi era nuevo, era la primera vez que pasaria la navidad con alguien que no era mi familia, ademas que desde que mis padres fallecieron no habia pasado con nadie estas fechas, y los pasaria con el, dias antes nos habian tomado unas fotografias para una revista en la cual ivan a hablar de el buen gobierno qe se vivia y ademas de la buena persona que era nuestro precidente, alcande y gobernador.

Entonces ahora pasar una navidad con el era bastante nuevo para mi, no puedo creer que en tan poco tiempo que nos habiamos frecuentado mas de lo que se podia aver echo en los años pasados ahora solamente era algo diferente y me agradaba estar con el, pero no sabia si era relamente bueno, estaba confusa por lo que estaba pasando.
Esta vez la fiesta de navidad seria en el hotel, no tenia nada preparado asi que lo hice en el balcon de mi habitacion del lugar, hice algo sumamente sencillo, una cena facil y deliciosa y eseraba que le fuera a gustar, ademas de un pequeño precente navideño en el que esperaba que no fuera algo muy pequeño, era la primera vez que le iva a dar un regalo a un chico que no era mi familiar y para verlo desde otro punto de vista, era mi prometido, en cual ahora esos besos que me daba, era sin querer indispensables paa mi.


Apenas faltaba una hora para que llegara a la hora acordada y todo ya estaba listo, pero no sabia que ponerme, no entendia como me interesaba tanto el que me viera bien para esa noche, me daba algo de pena y mis mejillas se tornaban rosas al buscar un buen atuendo, algo lindo y sencillo pero a a vez nada provocador, no me gustaba mostrar de mas por la falta de confianza a mi misma y mi figura, era dada a traer mi cabello recojido o suelto, por no saber que hacerle en algunas ocaciones, y ahora me sentia completamente fatal, mi maquillaje no era bueno y nada que ponerme, quisas debia aver comprado algo anterior mente, me vere bien con eso o con aquello?
Tantas dudas en mi mente pasaban cuando faltaban solamente 20 minutos para que llegara, ya lo que fuera bueno, eso bastaria, acomodandome la ropa que estaba en la estateria frente mio y un saco largo para cubrir mi cuerpo del frio.


Exactamente las 11pm y esucho a mi timbre tocar, un nervio recorri las puntas de mis dedos y ademas el frio de mis piernas para apresuramre y abrir la puerta para verle directamente a los ojos, era el, ademas de que se veia tan buen moso, mis mejillas se tiñeron de ese color rosado al verlo - buenas noches.. Sr. Kim - dije mientras le abria paso para que se adentrara a aquel cuarto solo, en donde solo se encontraba la ventana abierta y pasar a el balcon para tomar nuestros alimentos. Ademas de tener una amplia vista de lo que era la habitacion completa del hotel, por un momento pense que una cena navideña en mi cuarto de hotel fue mala idea.


Al entrar quisas seria muy descortes no saludar como lo habia echo en otras ocaciones, asi que tome su mano y le detuve para tener de fijo nuestros rostros y mirarnos mutuamente, acercandome un poco a sus labios por un momento me sonroje mas de lo debido y desvie mi boca para besar su mete como un mejilla, al verlo note como un rubor se propago dando un encanto propio a su rostro - La cena esta en el balcon... la vista esta hermosa.. - sonrei para dirijirle sin antes rectificar que aquella bolsa donde habia guardado un prencente estuviera escondida y ver los platillos ya servidos para comenzar a cenar.. aunque mi mirada no podia dejar de estancarse en su rostro y aquellos labios.

La Navidad es una celebración extendida por gran territorio del mundo, además de las personas que por cuestiones de fe de la celebran como el nacimiento de su redentor, existen quienes la celebran como una oportunidad de reunirse con su familia pero a su vez, gente que solo lo toma de pretexto para dar rienda suelta a sus vicios. Mi cabeza está llena de ideas y confuso en cuanto a si esta celebración es causa de bien o mal para la humanidad.

En cuanto a mi estoy aun sin necesidad de realizar esta celebración, creí que con la fiesta de recaudación de juguetes había cubierto mi cuota para la imagen al público, pero mis asesores no opinan lo mismo y me han indicado que pasar solo esta fecha podría tener repercusiones en cómo me ve la gente, por lo que debería tener una celebración más significativa.

Como tal no tengo una familia a la cual acudir, puesto que el alcalde es hijo único y su madre se ha mudado a Europa desde la muerte del padre de Kim JaeJoong.
Con la situación en estos términos solo quedaba una opción, celebrar la Navidad con la prometida del alcalde, la señorita Go Ara.

De tal forma, el día que nos encontramos para unas fotografías de prensa, le pedí con la mayor cortesía que pude el reunirnos el día 24 de diciembre para cenar juntos y conmemorar la fecha…con un gesto de extrañeza acepto y acordamos la hora del encuentro.

Por alguna razón mi secretaría puso una cara de sorpresa y sonrojo al agendar la fecha, horario y lugar de este encuentro, puesto que, Ara y yo pasaríamos la Navidad en la suite que usa en el hotel cuando no puede volver a casa. No supe porque y no quise preguntar de nuevo, con la fama de conquistador que Kim Jaejoong tenía según me han hablado ciertas personas cercanas a él no debe estar en duda mi entendimiento en estas cosas.

Ese mismo día me visitaron en casa unos “amigos” del alcalde para llevarle a divertirse a un nuevo club en el que aseguraban había unas chicas hermosísimas, al decirles que ese día ya tenía programado pasarlo con mi prometida las felicitaciones no se hicieron esperar. Diciendo cosas como: “Hasta que te animaste” “Ya era hora, yo con una prometida así hasta fiel me volvía jaja” “tu fiel? Y yo feligrés? No te digo? Pero Jaejoong, bien por ti!!! Y a donde te la llevaras? La traerás a casa después para~~”

No completaban las frases, se me hacía difícil entender a que se referían, su lenguaje estaba lleno de gestos y códigos que seguramente habían desarrollado en todo el tiempo que habían pasado juntos, no podía ser descubierto así que solo reía a la par y respondí.

-No he planeado llevarla a ningún sitio, ella me ha dicho que estaremos en su suite del hotel

Fue como si una bomba explotara al medio de la sala al escuchar sus gritos y risas: “en su suite? Te trae ganas!!!” “jaja ahora si ya le darás con que no quejarse de que no le atiendes” “y mira que si que esta desatendida, la ve una vez al año” “ya te vale Jaejoong, atiéndela más seguido o se consolara con otro” “si quieres yo la consuelo!!! jajajaja”

Eran pocas las cosas que entendía de sus diálogos, sin embargo capte que todos estaban a favor de que el alcalde debía pasar mayor tiempo con Ara…por lo menos eso entendí…

El día señalado no se laboro en el Ayuntamiento, así que dediqué el tiempo de ese día en verificar lo que mis hermanos dioses habían hecho, hasta ahora han estado demasiado tranquilos y eso no me da buena espina…algo traman.

Empezando a caer la tarde me prepare para la ocasión señalada, me vestí y presente en el hotel tal como Ara me había explicado.

Spoiler:

De pie frente a la puerta de su habitación verifique la hora en mi reloj de pulsera, las 11 en punto, momento de tocar el timbre de la habitación, la puerta se abre escasos segundos despues
Acostumbrado a las reuniones laborales, entre y salude con una sonrisa.

-Buenas noches~ has estado bien?

Ingrese a la habitación y di un vistazo a todo el lugar, observando con detenimiento cada rincón, el amplio balcón y la mesa ya preparada para la cena.

Esto invadía mi mirada cuando mi mano fue tomada para detener mi caminar y voltear a vernos fijamente a los ojos, su rostro se acercaba al mio, seguramente a buscar un beso como ya en otras ocasiones había sucedido, pero antes de conseguirlo se ruborizo y ese beso fue a dar a mi mejilla. Es una extraña sensación la que ocurre cuando me besa, puesto que un calor recorre mi rostro haciendo mis mejillas tomar ese color rojizo que he visto en su rostro otras veces también.

-Se ve todo muy preparado a detalle, pasemos una linda velada~

Sonreí de nuevo y acompañé sus pasos hasta el balcón donde me senté a la mesa observando el contenido de los platillos, el placer de comer estaba siendo deseado por mi boca de nuevo, pero me contuve y trate de hacerle plática para no ser descortés.

-Todo esto~ se ve exquisito!!! Has tenido muchas dificultades para prepararlo?

Me fije que no dejaba de verme, pero aun no se que significa eso en cada ocasión, por lo que tome una fresa y sonriendo me la comi.

-Sumamente dulce~ las has probado?

Tome una mas y la acerqué a ella convidándola, no tenia ni idea de los rituales a realizar en una celebración como esta.

Fue cuando nos sentamos el uni al otro y de nuevo volvieron esas pequeñas muestras de afecto en el, en esta ocacion me ofrecio una de las fresas para tomarla entre mis labios, le mire a los ojos y regrese de nuevo mi mirada a la fresa, acerque mi boca a sus dedos para tomar la fresa entre mis labios, a lo mismo que me mis labios tocaron sis querer sus dedos que la sostenian, me aleje despues de comerla y mirar a un costado.

-Tranquilo, fue rapida echa la cena, comamos antes de que se enfrie - le dije cuando me levante para dirijirme a un lado donde tenia cubierta la cena para que no se enfriara, ademas de aceercarme a su lado para colocar su plato y despues colocar el mio para volver a mi asiento, me sente de nueva cuenta y le mire para que comenzaramos a comer, - Buen provecho espero te guste - comente para volver a comer, un silencio se propago, la verddad no tenia ni idea de que poder hablar con el, ademas de que el tenia varias ocaciones su mirada hacia mi, me levante para quitarme el saco cuando inmediatamente el hiso lo mismo para ayudarme - Oh.. Gracias - volvimos a nuestros hacientos y solo esas miradas y el silencio incomodo se propago.

La verdad no teniamos ningun tema de conversacion, ya varios años atras nunca teniamos platicas congurentes, eran pocas las veces que hablabamos de algo, y si lo haciamos siempre terminabamos en discucion, antes de dar otro bocado lo volte a ver, era verdad, como era de un tiempo para aca nos llevabamos ligeramente bien, como era que lo deje dormir en casa, como fue que lo bese y le mostre una parte asi de mi, como era posbile, es lo que no me lo explicaba como era posible, y ahora me veia buscando un modo de conversacion, bufee un poco, ya que me sentia una acosadora, quisas.. era extraño, o no lo sabia, pero quisas lo mejor era tomar temas que habiamos hablado ya hace un pasado y no iniciar algo nuevo.

- Sr. Kim recuerda las entradas de huespedes del año pasado a mi hotel? este año han venido en un aumento del 45% siento que es una gancancia, apesar de que nuestros encuntros son limitados veo que la imagen que hay de nosotros hace que los turistas quieran encontrarse con usted y con el hotel de mayor historia en el pais, seguramente recordara la primera foto del primer beso, ese dia las ganancias de el hotel fueron de un 89% tenemos que pensar en algo para poder hacer algo similar, asi que tenemos que pensar en algo, además recuerda también el regalo que me dio frente a la prensa hace ya unos meses, al parecer se lo quedo usted, me lo podría traer por que entrando el año me harán una entrevista en la cual me dicen que gustaría ver el primer regalo que usted me dio – le mire y note como su rostro estaba casi con un cartel en la cabeza que decía “De que hablas” – Emm… no recuerda? - di un suspiro – no a cambiado mucho, siempre usted es asi, aun recuerdo el primer dia del acuerdo de nuestro matrimonio… - calle por u segundo – la verdad no quiero… bueno hablemos de cosas mas alegres – me levante de mi lugar para dirijirme a dentro de la habitación y traer con migo lo que era una bolsa, en donde le había comprado un regalo de navidad, era la primera vez que hacia algo similar.




Volvi a acercarme con la bolsa en manos y sentarme a su lado - Quisas.. apesar de todo.. como su prometida tenia que hacer un regalo de navidad para usted Jaejoong-shii - hice una reverencia, sabia que el detestaba que le llamara por su nombre ya que en ocaciones atras me habia dicho que no estaba a su alcanze para ser tan vulgar con el - disculpe no fue mi intencion llamarle por su nombre Sr. Kim - volvi a rectificcar, otorgandole el regalo en sus manos, - Feliz navidad, espero sea de su agrado - dandole el regalo en sus manos sonrei y preguntandome que si lo podia abrir le rectifique con una afirmacion moviendo mi cabeza.

-Pero.. antes de que lo abra.. me gustaria decirle que si despues de que lo vea me podia dar usted algo a mi - le mira y sonrei, apesar de las cosas que habian pasado, tanto en el pasado como apenas hace unos dias, todavia esperaba el momento en que me dijiera que su actitud era totalemnte farsa y solo estaba bromenado conmigo, que esperaba el momento indicado para decirle a sus amigos que estaba callendo pero no iva a ser tan facil, esperaba que fuera alrevez - Sr. Kim, me gustaria que despues de que lo abra.. usted sea quien me bese esta ocacion - le mire a los ojos, apesar de que ponia todo de mi, era seguro que mi rostro se sonrojaba tan solo al mencionar esas palabras, pero quisas en mi queria volver a besarlo, o quisas solo queria molestarlo, no estaba segura de que tantas cosas podrian ser las que pensaba mi subconciente, o relamente era yo.

Regalo:

Tenia entendido que los hombres hoy en dia una de las cosas mas utilez que les podian otorgar eran las mancuernillas y las corbatas, ya que eran para cualquier dia y eran un buen uso masculino, era pesima escojiendo regalos y mas si era para un hombre, despues de ser abierto el regalo le mire y me acerque aun mas a su cuerpo dando un jalon a la silla, mordi mis labios con ellos mismos queria saber de que manera reaccionaria, queria ver si realmente seria capaz de besarme por su cuenta propia, y descubir que habia detras de todo esto, y de todo lo que habia pasado.

Al comer de mi mano rozo ligeramente mis dedos con los labios~ la sensación que se propago por aquellos dedos era tan extraña, cosquilleaban como mis labios cuando le miro y recuerdo los besos dados. Acaso los labios de Ara tienen algo que provoca esta reacción en el cuerpo de Kim Jaejoong? Que es lo que le hace tener estas sensaciones?
Por algún motivo después de comerla desvió la mirada y no siguió pendiente de mí, extraño aun mas ya que desde que llegue había estado vigilándome.

Se puso de pie y la cena comenzó, sin una palabra expresada de ninguno, en parte porque no sabía que hablar con ella y otro tanto que quizá me causaba mas distracción era el sentir al máximo el sabor de la comida dispersándose por mi boca~ extrañaré estos sabores cuando abandone el cuerpo humano y volver solo a mi esencia divina~

El silencio se rompió con su voz tratando el tema de cómo la imagen al publico de nuestro compromiso beneficiaba la economía del hotel, le daba buen prestigio y un interés especial para los visitantes.
Pero sin más las cosas personales ligadas a la relación con el alcalde Kim Jaejoong me eran totalmente desconocidas, no sabía absolutamente nada al respecto de esas circunstancias en sus vidas y los detalles que mencionaba mucho menos.

-Ese regalo?...No estoy muy seguro…Lo buscaré lo prometo~

Intenté fingir pero era demasiado tarde, el cuerpo del alcalde empezaba a enlazarse al 100% con mi espíritu y la expresividad del rostro denotaba mi completa confusión.
Hablaba del acuerdo de matrimonio y un poco de ansiedad se me presentó, no tenía idea de lo que podría decir ni tratar al respecto, pero por gracia del destino y que aparentemente a ella tampoco le agradaba recordar tales cosas cambio el tema. En un principio pensé que le había afectado la situación y se había ido por ello, ya que aunque la cena estaba casi terminada nos quedaba aun el postre que se veía exquisito y finamente decorado, creía que ir a ella era lo adecuado pero regreso pronto y me entrego un regalo.

-Ah? Mi nombre qué?

Me llamo Jaejoong en este cuerpo, aun lo olvido a veces, todos me llaman alcalde Kim o Sr. Kim por lo que no me sentí aludido cuando me llamo por el nombre, pero apaciguare ese error. Después de todo tengo que acostumbrarme a que me llamen de esa forma.

-Jaejoong te parece un buen nombre? Es refrescante que me llames así a diferencia de todos los demás

Dediqué una sonrisa agradecida y saque el regalo de la bolsa después que me diera su autorización para ello. Aun así, segundos antes de abrir la cajita me detuvo para pedirme algo que me dejo pensando, me pidió que le besara y es lo que me trae a la mente que el inicio de todos los besos hasta hoy han sido dados por ella y correspondidos solamente por mí. Su rostro cambio al rubor ya conocido por mí en todos nuestros encuentros y sobre todo cuando se trataba de los besos y la cercanía de nuestras personas.

Me pensé que el darle un beso no supondría mayor problema, después de todo ya había leído y visto en internet lo suficiente para ello, aunque aun no podía nadie explicar claramente el cosquilleo en mis labios.
No supuse gran problema y abrí la caja encontrando un juego de mancuernillas, corbata y pañuelo que combinaban con la mayoría de los colores que uso para los eventos oficiales, un regalo útil, sin duda para seguir conservando la imagen pública a tope en el gusto de la gente.

-Un regalo excelente!! Supongo que podría ponérmelos para algunas fotos mas y darle publicidad al hotel~

Recordé la petición hecha y al voltear note que su cercanía era mayor que hace unos instantes, era momento de cumplir con lo acordado.Deje la caja del regalo abierta sobre la mesa y gire sobre mi eje en la silla para verla de frente.

Su rostro cambio al ver mis acciones, se paralizo prácticamente y no me veía fijamente a los ojos. Ubique una mano en el respaldo de su silla para sostener el peso de mi cuerpo y me aproxime lentamente a su rostro que no sabía si se quedaría quieto o buscaría huir.

Mi mano rodeo su cintura en delicada caricia. Pocos instantes después nuestros labios estaban unidos de nuevo, sin palabras, sin preámbulos, solo lo hice directamente, la razón principal quizá fue que no sabía o no tenía idea de que necesitara decir algo más, solo sabía que debía besarle tal como se requirió antes de hacerme entrega del regalo.

Después de unos minutos satisfaciendo las sensaciones de los labios de ambos, que se conocían de principio a fin, que se encontraban hasta ahora pocas veces pero era casi una necesidad el estar juntos, saciados en parte se separaron dando lugar a las respiraciones profundas que el cuerpo nos solicitaba.

-He cumplido bien con mi cometido?

Sonreí de lado y veía sus ojos sin apartarme un ápice de distancia, solo estaba ahí, respirando el mismo aire y observando su rostro a la expectativa de su respuesta.

Al sentir como sus labios rozaron conmigo, por alguna razon me sentia tan bien, y estaba teniendo miedo, por que, el aura con el, ya no era igual a antes, los dias anteriores y en años pasados el estar a su lado no era lo mismo, antes era tan diferente antes el estar a su lado era de temer, y antes era de estar temblorosa por las cosas que podian pasar o tan solo las reacciones, y ahora me doy cuenta de que es tan diferente y que las reacciones que teniamos eran tan dificiles, y ahora por algun motivo nervios se podian sentir entre mis dedos hasta la punta de mis pies, ¿Acaso me estaba enamorando?, no lo creo, solo nos hemos estado viendo varios dias, y ademas de eso solo nos hemos estado besando por que yo queria y se lo pedia, y eran las causas de que queria ver su reaccion, sus palabras y no me estaba diciendo nada de lo que queria saber, si no las evadia o por la verguenza que yo tenia despues de aquellos besos prolongados y de las carisias que de vez en cuando se escapaban, quisas me estaba asustando, pero no debia perder la razon, y debia regresar.

Aun recordaba la primera vez que me enamore de una persona, yo aun era una adolecente, y esa persona doblaba mi edad, era solo alguien que conocia de vista y nunca me le habia acercado, y los besos que el me habia otorgado, sentian las pequeñas mariposas que llegue a sentir cuando me atraia aquel hombre de mayor edad, era como las cosquillas que se me precentaban por nervio acaso? no estaba segura pero tenia un poco de confucion.

Me levante un momento para traer un poco de agua, ya que en a mesa solo habia vino, al entrar a la cocina, note como a precencia de nervio era cuando estaba con el o me miraba a los ojos, remoje un poco mis manos y las pase por mi rostro, para mi suerte no estaba tan maquillada y de ese modo no fue necesario volver a retocarme, mire mi relejo en el horno que se encontraba a mi lado, y quisas no queria perder la razon, solo por su fisico, por que yo sabia en realidad el tipo de persona que es, sabia que su corazon era frio y que solo queria jugar con los demas, que la primera persona a la que desapareceria seria yo por que no tenia que soportar un peso sobre el, y menos siendo una mujer.
Pero sentia la necesidad de que el cambiara su parecer, para despues ser yo quien se desquitara, pero a la vez queria saber cual era su verdadero pensar sabia que habia algo detras de el, ya que no era comun que tuviera tan buena conducta con migo asi que por que no descubrilo; regrese a aquel asiento para verme frente a el cuando nuestros rostros y miradas se encontraron.

Me acerque a su cuello ya que estabamos tan cerca de nuestros cuerpos, y me cole por aquel cuello que tenia, dando rozes a su oido y comenzar a besar su lobulo lentamente, para despues bajar y comenzar a besar su cuello delicadamente, pasando mis brazos a su alrededor para poder llegar a seguir disfrutando de aquel sabor de su piel que quisas no habia experimentado, note que no se movia y se habia quedado como en estado de shock sin hacer ni un solo movimiento ante mis acciones y mucho menos decir nada, le abre sorprendido o no era de su agrado,.
Aun asi comenze con esos besos en su piel y acercandome mas a su cuerpo mientras le abrazaba, quisas no me iva a decir nada y dejar solo que continuara con mis acciones, supongo que, cuando estaba con otras mujeres hacia lo mismo, esperando a que las susodichas hicieran todo el trabajao y el sin hacer nada solo disfrutar de las acciones que le podrian procesar entre su cuerpo.

Pase mis labios a su oido de nueva cuenta para lamer su lobulo delicadamente, y mis manos solo se dedicaban a aferrarse a su camisa para no caer de la silla que me detenia, mis labios no se separaban, cuando depronto senti muy curiosamente que su piel se herizo, quisas el frio? no lo se pero mis labios en su oido seguian jugando mi lengua con su piel, y solo la suya se herizaba con el contacto mio.

Supongo que era porque era, ya que mis labios y mis manos eran nuevos para el, asi que solo decidi seguir con las carisas hasta separarme. y verle a los ojos, por un momento se desvio su mirada de mi y se fue al suelo para de nuevo retomarla en mis ojos, sonrei de manera agradable y suspire para volver a hablar entre nosotros - Muy felices fiestas Jaejoong-shii - dije para relamer mis labios y acomodarme en la silla que tenia para poner un poco de azucar en las fresas y comerlas lentamente.

No me respondió la pregunta, en su lugar se levanto y fue a la cocina, me quede estupefacto y sin saber que era lo que correspondía realizar en ese instante, quizá debía ir con ella a ayudarle o solo quedarme sentado a su espera, las normas de cortesía siempre se me presentan con esta complejidad, para eso tengo asesores en los eventos oficiales, sin embargo aquí, con ella no puedo traerlos conmigo.

Me levantaba de mi asiento para ir en su búsqueda cuando ella volvió, se sentó de nuevo en el asiento frente a mí y le mire con una sonrisa mientras volvía a ocupar mi lugar.

La cercanía se hizo cada vez más corta en un abrir y cerrar de ojos. Sin saber porque, o tal vez si sabía, nuestros cuerpos muy juntos y ella dándome delicados besos en la oreja. Que ocurría? Cual era la reacción adecuada? Cerré los ojos y me quede inmóvil solo experimentando estas nuevas sensaciones para mi, en todos los siglos que tengo de vida jamás había sentido tales cosas, probablemente porque nunca había tenido un cuerpo humano, mis posesiones anteriores han sido siempre en animales de gran tamaño, con ferocidad capaz de someter a tribus enteras para ayudar a mis aliados en la dominación humana. Pero nunca hasta ahora había sentido lo que un ser humano experimenta en el cortejo con otro de su misma especie, esta sensación, este deseo que aun no me aclaro, que no entiendo que es lo que pide, que solo permite y da pase libre a mas de esas caricias anheladas.

Pude sentir sus manos que se aferraban a mi camisa por dentro del saco. Esta cercanía, esta unión de su cuerpo con el mío, la forma de erizarse de mi cuerpo con el roce de sus labios me…gustaba~ y mucho~ quería seguir sintiéndolo, quería más!!

Cuando mi cuerpo se movió un poco para acomodarme en la silla y eliminar los pocos centímetros que separaban su cuerpo del mío, cuando quise por fin responder a esos sentires, fue en ese momento que se separo y me miro a los ojos.

Sé que cuando miras a una persona a los ojos debes decirle algo, pero en este caso no vino a mi mente una sola palabra que decirle, así que mire al piso tratando de acomodar las ideas en mi cabeza, aunque prácticamente mi razón había dejado de funcionar cuando mi cuerpo comenzó a experimentar esas sensaciones provocadas por sus besos.

No tarde mucho así y levante la mirada a sus ojos, en mi mente estaba lo que diría y mis labios preparados s pronunciarlo, pero los sonidos que emitiría fueron sacados de conversación cuando de su voz escuche la felicitación por las fiestas. Suspire de una forma igualmente nueva, acaso quería decir esas palabras? Que me has hecho Go Ara? Porque me estoy comportando tan tontamente y sin atinar a nada cuando estoy contigo?

Y ahora extrañamente el verla relamerse los labios y girar en su silla para centrarse en comer las fresas abarcaba toda mi atención.

Que me pasa? Porque deseo que me mire de nuevo? Porque estoy aquí inmóvil observándola esperando a que voltee y pueda tenerla cerca otra vez?

Sacudo la cabeza deteniendo el proceso mental que hace que tales ideas se agolpen en mi cerebro, pero el anhelo sigue ahí, en este instante el delgado hilo que me ata a no relacionarme con los humanos se ha roto, ya no quiero mantener el margen, quiero experimentar de nuevo esas sensaciones, después de todo…cuando me vaya de este cuerpo quizá nunca más pueda volverlas a sentir~

Coloque la silla lo más cerca a la de ella pero aun un poco atrás, me senté de lado y me incline hacia adelante rodeando su cintura desde atrás con mis brazos y acercándome en un abrazo en el cual mi cuerpo protegía su espalda y mi rostro quedaba apoyado en su hombro. Sentí esa calidez~ la que deseaba~

Cerré los ojos y suspire de nuevo, solo permanecí así, sin movimiento, sin nada pasando por mi mente, solo sintiendo la delicadeza de su cuerpo unido al mío. Pose mis manos en su vientre de forma delicada sin irrumpir de ninguna manera violenta, la lentitud era mi mejor aliado para saber si lo que estaba haciendo era inapropiado o no…pero no rechazo mis acciones, aunque no sabía en verdad si estaba de acuerdo con ellas, puesto que al abrazarla así me era imposible ver su rostro…